Una alianza público privada entre Davivienda, la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ), el Área de Conservación Guanacaste (ACG) y la Fundación de Parques Nacionales de Costa Rica (FPN) busca la restauración hidrológica de 10 hectáreas del Manglar Bahía Tomas, en La Cruz, Guanacaste.
En ese sector se desarrolló durante muchos años una salinera, la cual fue abandonada hace 40 años, pero dejó grandes estragos en el lugar producto del exceso de sal.
Se espera que, durante este año, se logren restaurar cerca de tres hectáreas que comprenden la porción dañada del manglar, para así lograr que estas se conviertan en un ecosistema apto para albergar biodiversidad.
Actualmente, se están realizando acciones de biomonitoreo y adecuación de canales para lograr bajar la salinidad en donde no se ha podido dar la regeneración natural.
Para esta iniciativa Davivienda Seguros aportará ₡2000 por cada póliza vendida, y para este año los fondos destinados rondaran los ¢20 millones.
Los manglares son unos de los ecosistemas que más carbono capturan, además son criadero de especies comerciales, protección de costas, hábitat para aves migratorias y purificación de agua.
El Área de Conservación Guanacaste, resguarda los pocos ecosistemas de bosque tropical seco que quedan en el mundo y el biomonitoreo en este ecosistema está generando datos de línea base relevantes para la comunidad científica.