Este miércoles se presentó en la Asamblea Legislativa el Índice de Burocracia para América Latina, el cual refleja que una pequeña empresa costarricense debe destinar por año 297 horas para trámites burocráticos necesarios para operar, es decir, el equivalente a 37 días laborales.
En el estudio realizado por el Centro Latinoamericano de Atlas Network y el Adam Smith Center for Economic Freedom de la Universidad Internacional de Florida, Costa Rica aparece como el segundo país donde las pequeñas empresas dedican menos tiempo para estos trámites. No obstante, la cifra sigue siendo alta.
Lo más preocupante es que de los 11 países estudiados, Costa Rica es el que en el porcentaje del tiempo se dedica especialmente para trámites relacionados con la administración de empleo. El 61% de la carga burocrática de las pequeñas empresas ticas, se dedican a este rubro, especialmente en salarios, impuestos y contribuciones.
“Esta realidad remarca la urgencia de aprobar las reformas institucionales y regulatorias que tiendan a eliminar definitivamente el exceso de trámites y cuellos de botella que hay en las instituciones del Estado. La existencia de tantos trámites y el tiempo que se debe dedicar para cumplir con todos los requisitos son caldo de cultivo para la corrupción, los sobornos y la informalidad”, aseveró el diputado Jorge Dengo, quien organizó la presentación del estudio junto a Ideas Lab.
El estudio refleja que en nuestro país el sector primario es el que más horas dedica a trámites, con un promedio de 408 horas por año, seguido por el sector secundario con 307 horas por año, mientras que el terciario le dedica cerca de 286,5 horas por año.
Reducir la cantidad de trámites que realizan las empresas para operar, ha sido uno de los objetivos del Poder Ejecutivo.
En setiembre pasado, el presidente Rodrigo Chaves anunció que, en conjunto con algunos de sus ministros y representantes de cámaras empresariales, definieron 163 cuellos de botella que debían eliminar. A finales de enero, ya se habían eliminado 92 de estas trabas eliminadas.
Incluso, el miércoles, el mandatario anunció que por medio de un decreto, se logró una simplificación de trámites en materia ambiental que beneficiará a proyectos de bajo o muy bajo impacto en el medio ambiente como lo son panaderías, pastelerías, ebanisterías, talleres, remodelaciones, actividades de servicios, entre otros, al eximirlos de la viabilidad ambiental.