Al menos 12.636 estudiantes no podrán asistir por el momento a clases en sus escuelas y colegios. Una vez más su proceso educativo se vio pausado, esta vez por la emergencia causada por las fuertes lluvias de los últimos días.
De acuerdo con el Ministerio de Educación Pública (MEP) los daños en centros educativos continúan en aumento. Para la tarde de este lunes se habían reportado 88 escuelas y colegios afectados; y ya para la mañana de este martes la cantidad aumentó a 105 instituciones.
Reynaldo Ruiz, director de Planificación Institucional del MEP, explicó que por el momento se desconocen las afectaciones reales, debido a que en muchos de los centros educativos continúan sin acceso por bloqueos en carreteras; además no descartan que el reporte de daños continúe en aumento.
A este momento, la mayor cantidad de afectados están en Turrialba, solo en esa localidad 2.933 estudiantes no podrán asistir a clases luego de que 39 centros educativos reportaran algún tipo de daño.
En tanto, Limón registró para este martes 15 centros afectados, Guatuso 9, Matina 8, Upala 7, Sarapiquí y San Carlos 6 cada uno, Pococí 5, Talamanca 4, Jiménez 3, Siquirres 2 y Guácimo 1.
Steven González, viceministro Administrativo del MEP, comentó que esperan esta misma semana realizar visitas a los centros educativos para identificar si se trata de daños estructurales o superficiales.
Hasta la fecha la afectación más grave que se ha reportado es el del centro educativo La Colina, en Valle La Estrella, la cual fue afectada por el deslizamiento de un talud. El presidente de la República visitó este centro educativo durante el fin de semana y aseguró que los estudiantes serán reubicados y se buscará otro espacio para la construcción de una nueva escuela.

Las clases continuarán suspendidas en los cantones declarados en alerta roja por la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias, mientras en los cantones con alerta naranja o amarilla reanudaron las clases este mismo martes en su modalidad combinada.
Eso sí, cada centro educativo deberá de valorar su situación y garantizar las condiciones óptimas para la modalidad presencial y garantizar, entre otros aspectos, la conexión con la comunidad principalmente para las clases a distancia.
El personal docente y administrativo que haya sido afectado por los desastres naturales disponen de permiso para ausentarse para enfrentar la emergencia.