Un costarricense de apellido Castañeda, transportaba en su camión cargado de aguacates y plátanos, un cargamento de 372 unidades de licores y 572 de refrescos, valorado en 1,5 millones de colones aproximadamente.
Aparentemente el camionero creyó que podría ocultar el millonario cargamento en la mercadería que transportaba.
Sin embargo, la pericia y la alta capacitación de los oficiales fronterizos, aunado al uso de tecnología de punta para la revisión de vehículos, pudo más que la astucia del camionero.
La mercadería contrabandeada localizada por la Policía de Fronteras, destacada en Kilómetro 35, distrito de Guaycará de Golfito, fue remitida a la orden de la Policía de
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