Luego de intensas reuniones entre las bancadas y visitas del Ministro de Hacienda, el Plenario aprobó este jueves un empréstito con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Agencia Francesa de Desarrollo, por $380 millones.
La principal preocupación de los diputados se centró en el uso de esos recursos, por lo que se aprobó una moción para trasladar $60 millones a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para mitigar el efecto de la rebaja en la base mínima contributiva como medida ante la emergencia generada por la pandemia.
Según la Diputada del PLN, Yorleni León, la fracción le dio el apoyo al proyecto porque el crédito ayuda a reducir gastos e inyecta recursos a la CCSS.
Por su parte, Carlos Avendaño de Restauración Nacional, dijo que inyectar fondos para fortalecer a la Caja es una prioridad de su bancada.
En la Fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) apoyaron el proyecto sin embargo criticaron que solo se otorgaran $60 millones y no $100 millones a la institución.
Los $320 millones restantes se utilizarán para cambiar deuda cara por deuda barata.
Para Laura Guido, diputada del Partido Acción Ciudadana (PAC), las condiciones del empréstito permiten reducir las tasas de interés hasta 4%.
“Esto es como que yo tenga la necesidad de comprar siempre el comestible de la familia y que tenga la opción de pagarlo con un préstamo muy favorable o pagarlo con la tarjeta de crédito que me cobra un interés más alto.”
Los fondos del empréstito inicialmente estaban destinados para apoyar el programa de descarbonización, sin embargo, el gobierno decidió cambiar el uso de los recursos para pagar deuda y atender la emergencia.